Diablo

Aunque jugué al Diablo II, cuando vi la oportunidad de conseguir el juego original de la franquicia a bajo coste ya que venia de regalo en una revista, no pude resistirme hacerme con el.

Una leyenda cuenta como desde el principio de los tiempos hay una guerra entre la Luz y la Oscuridad, el Gran Conflicto, una eterna batalla en la que el ganador se ara con el control de la creación. 

Tras largos siglos de batalla, aparecieron los humanos, los que tenían la cualidad de poder elegir entre el bien o el mal, los cuales llegarían a tener la capacidad de poder poner fin a la guerra, que desde entonces fue conocida como La Guerra del Pecado. A diferencia de los ángeles y demonios que vivían en el plano espiritual, los humanos habitaban en el plano físico, motivo por que esas criaturas trataban de conseguir aliados entre los humanos, llegándose incluso a romper el velo que separaba el plano real del espiritual.

Los demonios enviaron las esencias del odio, terror y destrucción a los humanos, con el objetivo de detener esa locura, un arcángel llamado Tyrael reunió a los más poderosos magos del mundo mortal para formar la orden de los Horadrim, que tenían el objetivo de encerrar a los tres demonios mayores: Diablo: Señor del Terror, Baal: Señor de la Destrucción y Mefisto: Señor del Odio en las Piedras del Alma, un objetivo que fue cumplido tras numerosas muertes.

Cada una de las piedras fue escondida en un lugar diferente, la de diablo en un gran templo subterráneo en una remota ciudad del oeste llamada Tristán. 

Han pasado alrededor de dos siglos desde entonces, y la la orden de los Horádrim ya no existe y las piedras se han quedado sin guardianes, y el poder de diablo esta renaciendo, hora los laberintos que hay debajo de Tristán, están infestados de demonios, no muertos y todo tipo de malignas criaturas, un momento critico ya que en el reino no quedan guerreros, solo quedas tu, por ello eres la ultima experanza.

Existe una expansión del juego llamada Diablo: Hellfire creada por Sierra que le pagó los derechos de autor a Blizzard Entertainment para realizarla, hay que decir que algunas de las mejoras de esa expansion, fueron posteriormente incluidas en Diablo II.

Tengo la costumbre de decir que las comparaciones son horribles y suelo evitarlas dentro de todo lo posible que puedo, pero tengo que confesar que en esta ocasión me sera bastante difícil el no comprar este juego con su segunda entrega, ya que al haber jugado primero a esa segunda entrega y mis primeras impresiones fue comparar estos dos juegos y por ese motivo esta opinión estará influenciada por esas primeras impresiones.

 Lo primero que me dejo a cuadros es que el personaje solo puede caminar y no correr, cosa que hace bastante lentas las partidas, algo que bueno se puede solucionar con mucha paciencia, luego estaba que el dinero ocupa espacio en el inventario, el cual es terriblemente limitado y no se puede guardar casi nada al no tener cofre y no tenemos tampoco el famoso árbol de habilidades, aquí las magias las tendremos que aprender a base de libros que iremos comprando o encontrando, al igual que el personaje no tiene demasiados cambios en su aspecto por el equipo, por lo demás se podría decir que básicamente estamos ante el mismo juego.

Pero hablemos de lo más importante, el sistema de juego, ya que a diferencia de los otros juegos que han salido de Diablo, ya que en esta primera entrega a diferencia de las otras en que nos dedicarnos a ir viajando de un lugar a otro enfrentándonos a los nuevos enemigos que allí habitan, aquí nos pasaremos todo el juego en Tristán y la laberíntica mazmorra que hay bajo del pueblo, bajando sus oscuros niveles y adentrándonos cada vez más en la oscuridad de lo desconocido, una mecánica muy a lo Dungeons&Dragons, simple e efectiva.

Pero hay una cosa que nunca cambiara en esta franquicia, pillaremos un calambre en el dedo a base de clickar a los enemigos que nos vendrán en en oleadas sin parar, pero también tendremos que ir con cierto cuidado, ya que nos exterminaran a la mas mínima, y en esta primera entrega si nos matan se acabo (hasta el ultimo punto guardado claro), así que este juego es ligeramente más difícil, al menos en ese aspecto.

Cuando jugué no llegue a terminármelo, ya que de aquellas no tenia el ingles demasiado fino, y claro jugar sin enterarme absolutamente nada de la historia, no lo veía demasiado factible, sin olvidar lo lento que se puede hacer el jugar a esta entrega y todo el tiempo que se tiene que invertir jugando a el, pero no por ello es un juego que haya despreciado y los ratos que invertido con el me lo pase bien, puede que en un futuro trate de retomar el juego de nuevo, pero eso ya sera cuando tenga más tiempo libre.

En fin, aunque es un poco viejo, aun se deja jugar un poco al tener serias diferencias en las posteriores entregas, y ademas increíblemente aun funcionan sus servidores de Battle.net, o al menos eso tengo entendido.