Aquí tenemos otro de los juegos que podido conseguir de forma gratuita desde la pagina web Tremor Games, y aunque no sabia que de que iba el juego, pues al precio de gratis me dio por probarlo.
Una feroz lucha está teniendo lugar en Asgard, el reino de los Dioses Nórdicos. Tan cruenta es la batalla, que acaba extendiéndose al mundo mortal de Midgard, desatándose la muerte y el caos.
La Diosa Hel, hija de Loki, desea vengarse por haber sido desterrada del reino de Asgard, del que fue expulsada por desobedecer las reglas de Odín. Enojada por su destino, Hel tiene por objetivo liberar a Fenrir. La leyenda cuenta, que el desencadenara el Ragnarök, la batalla del fin del mundo, con ese objetivo reúne un gran ejercito con el que mata y esclaviza a los pueblos vikingos de toda Midgard.
En una de esas batallas cae abatido Skarin a las manos del paladín de Hel. Pero en ese momento a Freya, la diosa de la guerra, se le encomienda la tarea de detener a Hel y defender el futuro de la humanidad. Para ello elije a su campeón, Skarin al que sana para que pueda luchar una vez más.
Skarin, es un gran, pero problemático joven guerrero, ignorante de la verdadera razón de su favor con los dioses y la verdad de esa guerra.
Como es evidente, el juego esta basado fuertemente en la mitología nórdica, donde la guerra entre los dioses ha provocado nuevos conflictos en el reino de los mortales, aunque claro, adaptado a su forma.
Como es lógico por la temática vikinga del juego, pues lo cogí inicialmente con muchas ganas, a pesar de no saber muy bien de que se trataba, ya sabéis como es lo gratis, uno va muy a lo loco.
Tras darnos la charla inicial y meternos un poco de golpe en la historia, nos dan muy pocos datos de lo que esta pasando y nos convertimos así por la cara en el adalid de la diosa Freya, desde ese inicio nos daremos cuenta que nuestro protagonista tendrá menos personalidad que una piedra, ya que se le aparece una diosa y suda de todo (es un vikingo machote, no se sorprende de nada), a parte de que no habla, cierto es que hay muchos con personajes carismáticos que no hablan, pero es que Skrim tiene la misma capacidad de expresión corporal que la protagonista de crepúsculo, cosa que hace que la trama sea más floja de lo que ya es de por si, puede ser entretenida, ya que nos muestran la trama a través de unas visiones que sufre el protagonista, con unas animaciones muy chulas... pero no llega a ser ni apasionante ni enamorarnos de ella en ningún momento.
Cuando empezamos a jugar, tenemos las típicas misiones iniciales fáciles para acostumbramos un poco al juego. El problema radica que tras eso nos encontramos que todas las misiones serán completamente iguales, aunque cambiemos de isla, tendremos que hacer una y otra vez lo mismo, rescata a los vikingos, libera los pueblos, reúne los fragmentos de un amuleto para invocar un dragón.
Entonces ¿donde esta la parte buena del juego? por una parte tenemos un hacks and slash, con el que podemos regodeamos mutilando a nuestros enemigos, por supuesto podremos ir recogiendo oro con el que comprar nuevas habilidades para seguir cortando extremidades, a parte que hay unos pocos enemigos que solamente se pueden matar con escenas quick time event y si fallamos vuelta a empezar, así que el juego nos pedirá una cierta habilidad. Pero donde se hace realmente divertido el juego es en las batallas, enormes enfrentamientos entre dos grandes ejércitos, y en más de una ocasión esas batallas sera asedios contra ciudades enemigas, la pena esta que con la corta inteligencia artificial de nuestros aliados, nos tocara ganar a nosotros la batalla, cosa que hace que algunos enfrentamientos se hagan un poco pesados.
Las batallas podrían haber llegado a ser mucho más interesantes de haberle dado un factor táctico en lugar de ser simplemente llegar y cargar recto, habría sido más interesante, cierto es que puedes usar tus habilidades mágicas para que las tropas aliadas tengan ataques de hielo, fuego y eléctricos, pero a parte de eso nada más, y eso que podremos usar un mapa táctico en el que vemos todo el campo de batalla para los ataques de los dragones, con los que podremos reventar algunas posiciones en las que se han fortificado los enemigos, aunque por lo general lo usaremos para destruir chamanes.
Otra cosa es que las bajas no importan demasiado (en ninguno de los dos bandos), ya que los chamanes reviven a los caídos, así que las batallas serán un poco monótonas al tener que ir siempre a por los chamanes, cosa que hace que vayamos directamente a por ellos.
Por lo general, se podría decir que es un juego perfecto para pasar el rato, no es extremadamente complicado, pero tampoco es super fácil, pidiendo en ocasiones que seamos hábiles y sigilosos para que no haya una gran acumulación de enemigos, usando el entorno a nuestro favor (no hay nada más divertido que arrojar de una patada por un precipicio a un enemigo con armadura pesada), una pena que cojee tanto en la historia que no es nada del otro mundo y que el final sea un poco flojo, no esta mal, pero se ve venir mucho que los tiros irán por allí, aunque yo pensaba que en el ultimo momento te harían elegir, tal como se estaban encaminado las cosas... pero no ni eso.
Una pena, un juego que podría haber sido muy interesante, pero se a quedado en eso, un juego para pasar unos días entretenidos y luego abandonarlo.
Tras darnos la charla inicial y meternos un poco de golpe en la historia, nos dan muy pocos datos de lo que esta pasando y nos convertimos así por la cara en el adalid de la diosa Freya, desde ese inicio nos daremos cuenta que nuestro protagonista tendrá menos personalidad que una piedra, ya que se le aparece una diosa y suda de todo (es un vikingo machote, no se sorprende de nada), a parte de que no habla, cierto es que hay muchos con personajes carismáticos que no hablan, pero es que Skrim tiene la misma capacidad de expresión corporal que la protagonista de crepúsculo, cosa que hace que la trama sea más floja de lo que ya es de por si, puede ser entretenida, ya que nos muestran la trama a través de unas visiones que sufre el protagonista, con unas animaciones muy chulas... pero no llega a ser ni apasionante ni enamorarnos de ella en ningún momento.
Cuando empezamos a jugar, tenemos las típicas misiones iniciales fáciles para acostumbramos un poco al juego. El problema radica que tras eso nos encontramos que todas las misiones serán completamente iguales, aunque cambiemos de isla, tendremos que hacer una y otra vez lo mismo, rescata a los vikingos, libera los pueblos, reúne los fragmentos de un amuleto para invocar un dragón.
Entonces ¿donde esta la parte buena del juego? por una parte tenemos un hacks and slash, con el que podemos regodeamos mutilando a nuestros enemigos, por supuesto podremos ir recogiendo oro con el que comprar nuevas habilidades para seguir cortando extremidades, a parte que hay unos pocos enemigos que solamente se pueden matar con escenas quick time event y si fallamos vuelta a empezar, así que el juego nos pedirá una cierta habilidad. Pero donde se hace realmente divertido el juego es en las batallas, enormes enfrentamientos entre dos grandes ejércitos, y en más de una ocasión esas batallas sera asedios contra ciudades enemigas, la pena esta que con la corta inteligencia artificial de nuestros aliados, nos tocara ganar a nosotros la batalla, cosa que hace que algunos enfrentamientos se hagan un poco pesados.
Las batallas podrían haber llegado a ser mucho más interesantes de haberle dado un factor táctico en lugar de ser simplemente llegar y cargar recto, habría sido más interesante, cierto es que puedes usar tus habilidades mágicas para que las tropas aliadas tengan ataques de hielo, fuego y eléctricos, pero a parte de eso nada más, y eso que podremos usar un mapa táctico en el que vemos todo el campo de batalla para los ataques de los dragones, con los que podremos reventar algunas posiciones en las que se han fortificado los enemigos, aunque por lo general lo usaremos para destruir chamanes.
Otra cosa es que las bajas no importan demasiado (en ninguno de los dos bandos), ya que los chamanes reviven a los caídos, así que las batallas serán un poco monótonas al tener que ir siempre a por los chamanes, cosa que hace que vayamos directamente a por ellos.
Por lo general, se podría decir que es un juego perfecto para pasar el rato, no es extremadamente complicado, pero tampoco es super fácil, pidiendo en ocasiones que seamos hábiles y sigilosos para que no haya una gran acumulación de enemigos, usando el entorno a nuestro favor (no hay nada más divertido que arrojar de una patada por un precipicio a un enemigo con armadura pesada), una pena que cojee tanto en la historia que no es nada del otro mundo y que el final sea un poco flojo, no esta mal, pero se ve venir mucho que los tiros irán por allí, aunque yo pensaba que en el ultimo momento te harían elegir, tal como se estaban encaminado las cosas... pero no ni eso.
Una pena, un juego que podría haber sido muy interesante, pero se a quedado en eso, un juego para pasar unos días entretenidos y luego abandonarlo.
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